Las relaciones personales,
familiares o amistosas son uno de los temas esenciales en el libro de relatos,
el primero, de Xenia García.
El trigo que cae, está dividido en
tres partes y consta de veinte relatos.
La primera parte HARINA, SAL Y
AGUA es la más extensa.
La vida en pareja, las relaciones,
la felicidad o la búsqueda de ella cuando parece que se tiene todo.
La rutina del matrimonio, el
desgaste del que no nos damos apenas cuenta. “En un matrimonio siempre hay una barra
que superar o una barrera que derribar, y un beso en la mejilla es sin duda un
ladrillo más”
La fantasía, la imaginación que
nos conduce a solventar los problemas. Incluso huyendo de casa con la chica del
tiempo. O dejándose desmembrar, cual mujer sumisa, por su amante.
Las fobias de cualquier ser
humano que arañan la convivencia. La monotonía, las nuevas experiencias que no
siempre salen bien. La tristeza.
La invisibilidad, la mirada que
se desliza por el cuerpo que tienes al lado, y ya no lo ves. La ensoñación de
un divorciado, lo que desearía para rehacer su vida y sueña con una mujer.
El miedo en las relaciones, el
terror, el no saber realmente quién es la persona que tienes al lado. “A mi
novio lo llamo Cristóbal pero yo sé que es, en realidad, el Hombre del Saco”
Los recuerdos de la infancia que
conducen a que la relación de pareja llegue a ser complicada.
Los asuntos íntimos, los de la
cama. Las mentiras o fingimientos.
En la segunda parte del libro
MASA MADRE, las relaciones personales derivan sobre todo a las filiales. El
repaso de la vida actual y las de nuestras madres, las diferencias esenciales
de la maternidad en ambas épocas. El embarazo y su repercusión en la pareja,
cómo enfrentarte a ello. El crecimiento de los hijos, su distanciamiento, su
negativa a cumplir con nuestras expectativas. El trabajo de la mujer, la
dificultad para combinar las obligaciones maternales con las laborales visto a
través de los ojos de una precoz niña de cinco años. Y la dejación de funciones
maternales.
La tercera parte, que consta de
un solo relato, COSAS QUE PASAN CUANDO VAS A POR EL PAN, es el retrato de la
infancia, de una familia aburrida, de una niña que se va haciendo mayor.
La mayor parte de los relatos
están construidos en ambientes cerrados: habitaciones, casas, calles, bares.
Esta intimidad ayuda a que las historias sean creíbles, incluso agobiantes en
algunos casos. Nada es lo que parece, nada lo que te puedes imaginar. La narración te va llevando por caminos
inesperados. Distintos registros que hace la lectura mucho más rica. Voces
femeninas, masculinas o el simple narrador.
Y la mayoría de los personajes perdidos dentro de su propia vida,
preguntándose hacia dónde ir.
Creo que, con este libro, Xenia
García ha debutado muy bien. He leído el libro con placer, sorprendida en
muchos casos, subrayando los aciertos en las frases, en las reflexiones de los
personajes. Disfrutando de una lectura muy buena.
Y Talentura Libros ha acertado de
pleno.
Muchas gracias por la reseña, Elena. Un honor estar en tu biblioteca ;-)
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