martes, 29 de julio de 2025

Las medias perdidas de Lorenza Mesttreta

 


El humor, en general, en literatura está considerado por muchos como un género menor. La literatura ha de ser seria, razonada y razonable. Y hay gente que ni se acerca a ella por si su currículo lector se ve manchado.

Acabo de terminar Las medias perdidas de Lorenza Mestretta, una novela corta escrita por Julia Otxoa y publicada por Eolas ediciones.

Esta novela de tan solo 48 páginas es el ejemplo claro de que la ironía, el sarcasmo y la mordacidad sirven para narrar la realidad cotidiana de la política y sus representantes.

Estas armas junto con la maestría de una escritora como Julia sirve como denuncia del ritmo actual de ministerios, parlamentos, comisiones de investigación e inutilidades diversas que más que facilitar la vida de los ciudadanos —la nuestra— nos la complican a diario.

La pérdida de un par de medias debido a un viento huracanado que azota la ciudad de Constanza es la excusa perfecta para todo ello.

—¡Muy bonito! —dijo levantando la voz una señora al fondo del grupo—. Nos despacha con bonitas palabras. Claro, como somos pobres…

Esta aseveración da pie al ministro de Asuntos Sociales para la repetición de un Congreso Internacional sobre la Pobreza para debatir qué vocablos de los muchos que aparecen en el diccionario de María Moliner se ajusta exactamente al término «pobreza». El problema es que la gente no entiende por qué los fondos destinados a este estudio no son repartidos entre los pobres.

El vuelo de las medias repercute en el ánimo de los habitantes de Constanza que se lanzan a las calles a manifestarse. En el Parlamento se cruzan las habituales pullas entre los partidos políticos —dos, exactamente. La oposición acusa al gobierno de que la tala incontrolada de los bosques ha sido la causante de estos vientos huracanados y de la desertización de la ciudad. El gobierno les acusa, a su vez, de tergiversar los hechos, ¿acaso no es más ecológico la reducción de detergentes nocivos utilizados en limpieza casera e industrial y su sustitución por arena que todo lo limpia y pule, incluso los rostros de los ciudadanos?

Y, como es habitual en las intervenciones parlamentarias y las comisiones de las comisiones, hay que buscar culpables. Por supuesto, ajenos al gobierno y a la oposición.

Julia Otxoa en estas escasas páginas (que tampoco hacen falta más) hace un retrato mordaz de la escena habitual de nuestra política.

Como yo no temo manchar nada y creo que el humor sirve para denunciar la realidad, animo a leer Las medias perdidas de Lorenza Mesttreta.


sábado, 19 de julio de 2025

MUERTE EN ALBATA - Jesús Espinós Andrés

 


Muerte en Albata es la primera novela de Jesús Espinós Andrés y ha sido publicada por Alalimón. 

Muerte en Albata es una historia real, con la dosis de ficción necesaria para convertirla en una novela sumamente interesante, con un trabajo apasionante que se percibe en toda ella. La historia comienza con un asesinato, el de Jaime Rosas, en mitad de la guerra civil española.

En los primeros capítulos iremos conociendo a los protagonistas de esta historia: los Olmo, sus raíces, sus relaciones familiares y sociales en esta Albata que no es otra que Camporrobles, el pueblo real.

En esta época y en zonas semejantes a Albata, algunos de los matrimonios eran concertados para acrecentar la hacienda; las mujeres quedaban en casa, al cuidado del hogar, del marido, de las labores del campo y de la descendencia; muchas de ellas, analfabetas y con una existencia durísima, tanto por las condiciones de vida como por las familiares.

El trabajo de documentación realizado por el autor ha sido exhaustivo como lo demuestran las páginas relativas a los hechos ocurridos en el pueblo, la proclamación de la II República, los levantamientos de los campesinos frente a los terratenientes y a la iglesia, la colectivización del campo, el papel que tuvo la CNT o la UGT en estos pueblos, con los protagonistas reales de la familia y allegados de los Olmo. 

En todas estas páginas, escritas con realismo y consideración, Jesús ha trazado el desarrollo de los acontecimientos que llevaron a esta familia hasta el paredón de Paterna. El relato de las represiones sufridas en Albata en cuanto triunfó el golpe de estado, las delaciones, las venganzas por el asesinato de Jaime Olmo o por ser republicano o socialista y el papel fundamental de uno de los personajes más relevantes de toda la historia: Calata, el alcalde que no permitió derramamientos de sangre en su pueblo. 

Hasta el final de la novela, hasta convivir con lo que sufrieron Santiago, Mercedes y Manuel, hasta llegar a la terrible fosa 96 del cementerio de Paterna el relato es estremecedor.

Jesús ha recuperado los modismos propios de esta zona, el habla cotidiana de aquellos tiempos, las costumbres, las canciones y algunas de las tradiciones.

En toda la obra se percibe respeto y pasión por lo que cuenta, su apego al pueblo, intentando siempre ajustarse a la realidad, sin juzgar a nadie ni por los hechos, ni por sus ideas.

Merece mención la aparición de María Moliner con su labor de enseñanza a través de las Misiones Pedagógicas y la llegada a Utiel de La Barraca y la interpretación de Fuenteovejuna.

Vale la pena que alguien con la pasión de Jesús rescate estas historias que se quedaron ocultas, dormidas o silenciadas durante tantos años en todos los pueblos.

Muerte en Albata

miércoles, 16 de julio de 2025

VIAJERO DE SALÓN- Miguel Sanfeliu

 








Después de terminar la lectura de “Viajero de salón” de Miguel Sanfeliu, publicado por Sílex, me pregunto en qué estantería guardarlo. ¿Ensayo? ¿Novela? ¿Biografías? Cabria en cualquier de las tres. Y dos de ellas: ensayo y novela, están justo frente a mí mientras escribo. También podría incluirlo en el apartado de Enseñanza de la literatura si tuviera un apartado especial para ello.

Miguel Sanfeliu escribe, como yo estoy haciendo en este momento, desde su lugar en el mundo, entre sus múltiples libros repartidos por su despacho, una silla, el suelo, estanterías en el techo o su propio dormitorio. Conozco personalmente a Miguel desde hace unos cuantos años. No puedo ser objetiva con respecto a él porque le tengo un aprecio especial. Miguel es honesto, generoso, discreto y culto. Y como ha demostrado en todas sus publicaciones: un excelente escritor.

Este libro, “Viajero de salón” es un canto de amor a la literatura, a la lectura, a los libros y a la cultura. Nos habla de su caótica biblioteca y a través de ella de su experiencia y su aprendizaje, del descubrimiento del placer de enfrentarse a autores desconocidos, a lecturas incómodas y, sin embargo, necesarias para la formación del lector.  

En referencia a la finalidad de este libro, dice: En todo caso sería más un viaje a mi mente, o más concretamente, a la parte de mi mente que ha sido influida por la ficción.

O

Este libro es un intento de verbalizar el sentido oculto del orden de mi biblioteca. ¿Cuáles son las conexiones entre unos y otros libros? ¿Por qué están juntos autores dispares y luego, sin embargo, libros del mismo autor se hallan separados? ¿Qué determina que unos estén en primera fila y otros casi ocultos?

En las páginas del libro nos invita a dialogar con los escritores y los personajes de los cuentos y las novelas que vagan por su habitación. Nos invita a indagar en sus vidas, en su relación con la escritura de sus obras, y entraremos en su existencia como haría cualquier detective. A través de todo ello, observa el mundo que nos rodea a todos, recuerda tiempos anteriores, el paso del tiempo, los cambios que se han producido y los que se avecinan.

Su relación con el cine y la música es tan importante como con la literatura. Debo agradecerle estas incursiones para una neófita como yo en cuestiones cinematográficas. Reflexiona sobre su relación con la escritura, de cómo se rodea de libros cuando está escribiendo, como una compañía necesaria, como una influencia beneficiosa a la hora de juntar letras.

Reconoce, no sé si llamarlo compulsión, su facilidad para comprar libros aunque sepa que no los va a leer pero que le hacen compañía, en librerías de viejo, en mercadillos de segunda mano, en el rastro de Valencia.

Dice: No soy un fetichista de los libros. No busco una edición determinada ni un ejemplar en peligro de extinción… las librerías de viejo son cuevas del tesoro…

La literatura es un refugio. Y esta biblioteca, como Miguel señala casi al final del libro es su espacio de trabajo, su lugar en el mundo porque su mapa vital empieza y termina ahí: entre este orden caótico que no tiene sentido sin él.

He disfrutado mucho con la lectura, con la pasión que impregna todas las páginas, con las historias de los escritores, escritoras, cuentistas, ensayistas; con su gran conocimiento de la literatura. Un viaje satisfactorio desde su salón al mío.

Léanlo. Lo van a disfrutar.


VIAJERO DE SALON Miguel Sanfeliu

Las medias perdidas de Lorenza Mesttreta

  El humor, en general, en literatura está considerado por muchos como un género menor. La literatura ha de ser seria, razonada y razonable....